Después de días ocupadísima, y de inaugurar ayer la época de compras navideñas, sólo me queda quitarme los zapatos y dedicarme a algún placer prohibido. Y si tengo que elegir uno, mejor elijo estos dos:
Una caja de marons Ladureé diseñados por Marni, y en oro, qué más se puede pedir.
Unas copas de champagne en la copa-zapato diseñado por Loubutin para Piper Heidsieck.
Lujo con un punto de perversión: ¿Quién se anima?
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3 personas fabulosas dijeron...:
Yo me apunto a los dos!!Esas tentaciones son difíciles de evitar.
La idea del champán en un zapato es increíble, pero si ya en en un Loubutin...Así la Navidad cómo no va a ser feliz...
Un besito enorme!
Mmm que rico!!!! ñam
besos
Me quedo con el zapatito de cristal...
Ah, sorteo de Skunkfunk en mi blog.
Un beso
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